Forbes Argentina
18 Septiembre de 2025 07.00

Julieta Schulkin

Milagros Miceli, la argentina distinguida por Time: "Sin el trabajo de las personas, no tendríamos IA ni redes sociales"

Share

Forbes conversó con Milagros Miceli, distinguida como una de las 100 personas más influyentes en materia de inteligencia artificial. Comparte la lista con Sam Altman, Elon Musk o Jensen Huang, entre otros.

A principios de 2000, estudiaba Ciencias de la Comunicación en la UBA. Cuando tenía 22 años fue mamá y a los 23, quedó viuda. Su vida dio un giro inesperado. Abandonó la carrera, se dedicó a criar a su hija y a trabajar de lo que podía. Pasaron algunos años y un día dijo: "Me tengo que ir". Aplicó a una beca para aprender alemán en Berlín y junto a su hija, de 4 años, viajaron a Alemania. 

Sin conocimiento previo del idioma, aprendió alemán en un año y, entonces, le extendieron la beca para seguir estudiando. Se postuló para entrar a la universidad pública en Berlín, la aceptaron, y allí hizo su carrera de grado en Sociología de la Comunicación (en Universität der Künste), un máster en Sociología y Ciencia Política (en Humboldt), y un doctorado en Ingeniería Informática (en TU Berlin). Hoy, la argentina Milagros Miceli es una de las 100 personas más influyentes en materia de IA de 2025, elegida por la revista Time.

Fue distinguida por el proyecto de investigación Data Workers' Inquiry. "Venía investigando desde hacía seis años el mundo de los trabajadores de datos, desde un enfoque sociológico, haciendo trabajo de campo, y también técnico, co-creando con ellos interfaces, sistemas, etcétera", explica Milagros a Forbes. Cuando recibió su título de doctora, con honores, sintió un "sabor amargo" por todo lo que le había descubierto durante su investigación. "Seguía en contacto con esas personas y para la gente no había cambiado nada. Realmente había sido testigo de mucha miseria, tristeza y desazón", expresa. Ese sentimiento fue una señal para no abandonar la causa. 

Consiguió fondos para continuar su trabajo a través de la plataforma Data Workers´Inquiry, inspirada en el documento de 1880 "A Workers' Inquiry" de Karl Marx. Esta metodología dio vida al proyecto de la argentina que hoy es distinguida. Durante una entrevista, Milagros explica el abordaje de su investigación, qué hacen los trabajadores de datos, por qué su rol es clave para que la IA funcione y por qué cree que fue elegida por Time. 

¿Cuántas personas en el mundo entran en la categoría de "data workers" (trabajadores de datos)?
Es difícil calcularlo, también es muy intencional de la industria que no se conozca el número. Ninguna empresa lo publica en sus estadísticas o reportes. Sin embargo, hay un un estimativo del Banco Mundial de 2024, en donde calculan que alrededor del mundo hay entre 150 y 430 millones trabajadores de datos

¿En qué consiste el trabajo de estas personas?
En un trabajo de investigación previo al proyecto de Data Workers´Inquiry, los clasificamos en cuatro grandes tipos de tareas. Uno es la clasificación y filtrado de contenidos en redes sociales y sistemas de IA. La otra tarea que precede a esto es la interpretación y etiquetado. Son tareas que tienes que ver con la generación misma de los datos. Por ejemplo, si pensamos en fotos de gatitos, te piden en un día laboral juntar 100 fotos de gatitos que encuentres en internet. Y a veces la generación de datos tiene que ver ya no solamente con internet, sino que hay que salir a la calle y buscar fotos de gatitos. En otro caso, el trabajo puede consistir en conseguir selfies, o fotos de pies. Hace poco una tarea en la Argentina era sacar fotos de tu DNI y el DNI de tu familia, y subir 10 fotos a una plataforma. 

miceli
Milagros Miceli investiga las condiciones laborales de quienes hacen posible la IA

La tercera tarea es el cuidado del sistema que se genere, se llama verificación algorítmica, es un poco engañoso el nombre porque en realidad el algoritmo no verifica nada, son seres humanos los que verifican. Se trata de confrontarse con la inteligencia artificial y ver que funcione según lo deseado y si no funciona, poner una red flag, es una tarea de mantenimiento y continua. Se cree que los sistemas son totalmente autónomos y no. Y al final, esto tampoco suele decirse, hay una tarea que consiste en impostar a la IA. Hay veces en que un sistema de IA no funciona. Cuando un chatbot no funciona, por ejemplo, hay 20 operadores en Madagascar o Buenos Aires contestando. La instrucción ahí es responder y nunca revelar que son personas. Contestan según algunos parámetros, que contienen las preguntas y respuestas posibles.

¿Es cierto que se paga USD 2 la hora por este trabajo?
Mucho de este trabajo se realiza en plataformas, donde se paga por clic o por la foto que suben o por el contenido que etiquetan. No se paga por hora. Es como un "Uber de la inteligencia artificial". Es un trabajo de plataforma. Y hay otra modalidad donde hay una empresa tercerizadora, en Kenia, en Argentina, en Colombia, en distintas partes del mundo, también en Europa, en España, en Alemania, donde se les paga por hora sueldos bajísimos. Y, por supuesto que el costo para la salud mental de estas personas es muy alto. Sufren de una presión enorme porque si bajan la performance les pagan menos, porque si el algoritmo dice que no están trabajando con calidad también les pagan menos. 

¿Cuáles son los países con más trabajadores de datos?
Podría hacer un ranking pero advierto que puede ser engañoso porque el primer país es Estados Unidos, aunque parezca mentira, la mayoría de este tipo de trabajadores por país se encuentran allí. La porción de datos que se crea en Estados o que se produce allí no tiene nada que ver con la cantidad de países que conjuntamente en el sur global aportan a la IA. Países como Kenia, Venezuela, Filipinas, Brasil tienen centros enormes de producción de datos para la IA que se produce. La India es un hub enorme para este tipo de trabajo. Ni hablar de China, que es un mercado en sí mismo, produce IA propia y tiene trabajo de datos propio, también muy apoyado por el estado, muy profesionalizado también. 

¿Qué pasaría con la IA si no existiera el trabajo de estas personas?
Bueno, no existiría. Los números muestran una historia muy clara, que comienza a partir de la aparición de una plataforma llamada Amazon Mechanical Turk, creada hace 20 años, que provee esta mano de obra a precios irrisorios, 24/7, el "Uber de la IA", que abre un pull de trabajadores dispuestos a hacer estas microtareas, que son estos trabajos que parecen fáciles, que parecen irrelevantes por unas monedas. Algunos le dicen el beer money, es como comprarte una cerveza. Está totalmente relacionado con la creación de los grandes conjuntos de datos usados para las inteligencias artificiales pioneras y para el día a día de la red, el reentrenamiento de las IAs que vemos hoy, su refinamiento, lo que se conoce como benchmarking. Sin el trabajo de las personas, no tendríamos IA y las redes sociales no se podrían usar, sin moderadores de contenido.

¿El rol de estas personas termina siendo siendo el de fact-checkers luego de la eliminación del programa de fact checking de Meta?
Meta volvió a usar fact checkers en otras partes del mundo o lo tercerizó a lugares donde trabajan más precariamente. Lo que está pasando es que en muchos casos leemos que reemplazaron a una cantidad de trabajadores por IA, pero la parte que no te dicen es que si bien hay una parte que están automatizando, hay otra parte en donde se siguen necesitando seres humanos, lo que pasa es que en vez de contratarlos, como los estaban contratando, por ejemplo, acá en Europa, ahora los contratan en América Latina por un tercio del precio. 

Esto pasó en Berlín donde hace unas semanas se hizo la primera huelga de trabajadores tecnológicos en Alemania, de TikTok. Charlé con ellos y estaban convencidos, incluso desde el sindicato, que los habían reemplazado con IA. Vengo haciendo un investigación de TikTok Alemania y sé que hay una parte de estos trabajos que se terceriza a Costa Rica. 

Aunque alcancemos la IA general (AGI), los humanos seguirán trabajando para la IA...
Está la distopía, esto de "van a crear la IA general donde nos va a dominar, nos van a matar a todos, va a venir Terminator con su ejército de robots y todo será un caos...". El problema es que esa distracción no nos deja hablar de lo que está pasando hoy con las inteligencias artificiales. Están basadas en una fuerza productiva que está siendo explotada. Y además, hoy la IA se está usando para la manipulación, para la clasificación de las personas, para el genocidio... De eso no estamos hablando. 

¿Cómo se solventa económicamente Data Workers´s Inquiry? 
Tenemos dos fuentes de financiamiento: el estado alemán que financia con 1.5 millón de euros por tres años para tener un equipo de trabajo en Berlín, donde soy la directora del equipo que hace este proyecto y otras cosas, no solamente financiaron este proyecto. Y por otro lado, se financia a través de mi otro trabajo en el Instituto DAIR.

¿Ustedes contratan a trabajadores de datos para investigación?
Sí y queremos contratar a las personas para que vengan y hagan investigación. Si mirás el repositorio en la plataforma te vas a dar cuenta que hay muchos formatos de investigaciones, no son papers académicos. Hay cortos animados hasta un cómic, hasta un fanzine, otros trabajos más periodísticos. Los contratamos por un total de 70 horas y les pagamos el equivalente a 35 euros la hora. Ese número no es arbitrario, es lo que ganamos nosotros como investigadores en Berlín.

¿Por qué crees que te eligió la revista Time?
Nuestro trabajo visibiliza una parte de la IA de la que no se venía hablando. Antes, la perspectiva sociológica dentro de la IA era un tabú, era como mezclar el agua y el aceite, y hasta hoy se sigue discutiendo. Ahí hay un mérito y es algo que los editores seguramente vieron. Time elige este proyecto por el impacto que venimos teniendo más allá de poner el foco en esta población trabajadora. Por eso estoy en la categoría de shapers, en esto de moldear un poco la conversación, no solo en lo que se refiere al discurso público, sino también a nivel legislativo. 

Hemos ido al Parlamento Europeo dos veces con trabajadores. Estas representaciones parlamentarias tuvieron una influencia también en legislaciones como el AI Act de Europa. En Estados Unidos también trabajamos cerca de senadores que se han enterado de este proyecto, de lo que está pasando y han enviado una carta de carácter parlamentario a los principales CEOs. Con algunos de ellos estoy en la lista de Time.

10