Uruguay y Paraguay son aún los elegidos dado sus ventajas fiscales, entorno seguro y economía estable. Perú y Colombia se les unirían en un futuro cercano.
Con incentivos fiscales para la construcción, blanqueo de capitales y ley de alquileres, el mercado inmobiliario busca retomar un ritmo que perdió hace ya tres años y que la pandemia socavó para luego transformarlo a través de una nueva demanda.