El nuevo ciberdelito se sofistica gracias a IA y los ataques ya afectan la seguridad de cualquier tipo de transacciones online
La inteligencia artificial se consolidó como una herramienta de doble filo; mientras los ciberdelincuentes la emplean para crear fraudes digitales cada vez más complejos, empresas y gobiernos la utilizan como instrumento de defensa para activos y usuarios.

La ciberdelincuencia en la Argentina trepó a niveles alarmantes: en solo los tres primeros meses de este año, se registraron 262 ataques informáticos alcanzando así  uno de los rangos más altos [63%] en América Latina, según el reporte mundial de la plataforma de biometría BioCatch .

Estas amenazas evolucionan al ritmo de la tecnología. La digitalización  de pagos, el empleo intensivo de móviles y el incremento del comercio electrónico conformaron un ambiente propicio para nuevas formas de extorsiones. También,  la velocidad de estas transacciones y su volumen dejaron obsoletos muchos sistemas tradicionales de seguridad.

Ese horizonte se enturbió más con el surgimiento de nuevos procesos capaces de generar ataques automatizados, apropiación de dispositivos [device takeover], deepfakes, computación cuántica y riesgos de terceros.   

"La inteligencia artificial [IA] es un procesamiento cognitivo, es nuestra mente, nuestro razonar. Se anticipa a algo. No necesita que esté el error humano sobre la mesa. Es capaz de prevenirlo", remarca Pablo Poza, asociado de Together Business Consulting.

Sin embargo, la IA es un arma de doble filo. "Puede emplearse para defraudar a una empresa, un usuario a un gobierno. Al mismo tiempo, crea soluciones para que todos esos actores se cubran ante la posibilidad de una embestida, para blindarse ante esa posibilidad", marca Iñigo Castillo, gerente General de Incode para Latinoamérica. 
 

De acuerdo a la consultora de seguridad Kaspersky Lab, hasta agosto de 2024, el mayor número de estafas en América Latina se dio en Brasil [1,8 millones de bloqueos], México [835 mil], Ecuador [402 mil] y Colombia [203 mil]. En tanto, para la web Comparitech, Dinamarca es el más ciberseguro del planeta.

Iñigo Castilllo, , gerente General de Incode para Latinoamérica

"Desde la mirada de los hackers no existen fronteras. Posiblemente, se registren más hackeos en un país que en otro no porque no haya tecnología para evitarla. Simplemente, responda a que el "negocio" pueda ser más grande en un lugar que en otro. Esto es global, tanto los fraudes como la disponibilidad de herramientas para evitarlos",  indica Poza quien es además profesor del IAE Business School y Director del Programa "AI for Business" de la Universidad Austral.

Ataques a empresas

A nivel local, un informe de ManageEngine señala que el 61% de las organizaciones experimentaron brechas de seguridad en el último año. El 29% enfrentó pérdidas económicas directas por ataques digitales.

En ese sentido, 76% de los usuarios argentinos admiten haber sido víctimas de algún modo de  estafa, incluso de phishing. Es decir, 3 de cada 4 fueron sufrieron una de estas malversaciones. Entre el 2023 y 2024, aumentaron 21%. Incluso, Google admitió, el mes pasado, un incremento de estos fraudes.

Para la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (UFECI) argentina, los últimos reportes muestran el incremento interanual más elevado. Del total, el 80% corresponde a engaño  online y usurpación de identidad por compras en Internet, en el home banking y en plataformas de inversión.

En Argentina, el 47% de los profesionales en seguridad detectaron el uso de la IA en intentos de ataque, de acuerdo a ManageEngine. A la vez, el 92% cree que esa herramienta será clave para la defensa empresarial a lo largo de este año. 
 

 Pablo Poza, asociado de Together Business Consulting

"La democratización de la inteligencia artificial hace que hoy sea más fácil hacerte pasar por alguien más. Los procesos de validación de identidad se comprometen ahora por los riesgos existentes en el mercado.  Aunque esta situación es global; vemos en Latinoamérica un grado avanzado de la sofisticación de esos ataques", puntualiza Iñigo Castillo. 

La consultora Gartner prevé que más del 25% de todas las interacciones con consumidores se gestionarán por completo por medio de agentes totalmente autónomos. Esto sucederá en pocos años más. Entonces, sin una infraestructura confiable se será blanco fácil de los ciberdelincuentes. Más cuando para 2027, el sector de huella virtual alcanzaría los 116.000 millones de dólares.

Identidad falsa 

"Los sitios financieros necesitan adoptar una estrategia integral basada en la resiliencia digital, una visión que integre monitoreo en tiempo real, automatización y análisis inteligente de datos en todo el ecosistema", comenta un trabajo de OCP Tech.

En tanto, la GenIA que concibe, en tiempo real, deepfakes,  rostros y voces sintéticas impulsó 300% en el fraude en la apertura de cuentas. A través de ellas se crean identidades sintéticas donde se combinan datos reales  con información falsa. 

"La IA  es la única manera de determinar, con suficiente confianza, si es real un documento o una persona dando una fe de vida en una operación remota. El ojo humano ya no puede notar las diferencias simplemente por el nivel de sofisticación de las falsificaciones", advierte el ejecutivo de Incode.

Por medio de tecnología multimodal,  la inteligencia artificial  determina desde la profundidad de una fotografía hasta el comportamiento de la cámara. "De este modo, cualquiera puede hoy en día hacer un deepfake y engañar a los sentidos humanos aun cuando sea de mediana calidad", advierte Castillo.

La App para verificar identidad de Incode

Para que cumpla con esas funciones es fundamental el deep learning o aprendizaje profundo [DL]. Este es un subconjunto del aprendizaje automático. Se caracteriza por el empleo de redes neuronales [ANN o NN] con múltiples capas para aprender patrones cada vez más complejos en los datos. Esto le permite reconocer imágenes, voz y lenguaje natural con precisión. A pesar de que no son lo mismo, las ANN profundas son fundamentales para este método. 

En cierta forma las tramas del aprendizaje profundo son un subcampo del Machine Learning [ML]. "Este último es un algoritmo simple. Viste tal o cual película y el ML te va recomendar tal otra. El deep learning cuenta con redes para reconocer un rostro, si es un hombre o un animal, si tiene ojos claros. Para logarlo precisa un volumen mayor de información", explica el socio de Together Business Consulting.

Frente a los desafíos actuales, las empresas argentinas deben protegerse de manera integral. Adoptar una postura preventiva. 

Pérdidas económicas

"Se registraron ataques muy sonados que atentaron contra la supervivencia de la compañía. Los ejecutivos tienen conciencia de ello. Ahora, invierten más para protegerse. Van más allá de reguardar su infraestructura. Priorizan los relacionados con el "front", la sección que interactúa con los clientes. Intentan blindarlo", subraya el representante de Incode.   

Desde el punto de vista empresarial, un ciberataque involucra tres temas. "El primero es la reputación. Por ejemplo, si una plataforma de pagos y sufre un ataque, ¿vas a volver a depositar dinero ahí?. Muy posiblemente, no. Este punto excede lo tecnológico", advierte Pablo Poza.   

En segundo término pesan cuestiones más relacionadas  con lo informático. Ahí entra la remediación, ver por dónde entraron, cómo lo hicieron. Para ello se emplean los test de intuición para "cerrar" esa venta por donde te ingresaron. Lógicamente, la IA es una herramienta fundamental tanto para resolver el inconveniente como prevenirlo. Es un auxiliar de los profesionales para detectar anomalías. Junto al machine learning automatiza casos de prueba en el desarrollo de software. El último asunto a resolver tras un ciberataque son los daños. Recuperar lo perdido.