La creciente adopción de estas fuentes de energía por parte de las empresas tecnológicas es una señal de que la industria se enfrenta a un escrutinio cada vez mayor sobre su uso de la energía.
Investigadores del Laboratorio Nacional de Energías Renovables de Colorado han rebatido las afirmaciones de que la adopción de la energía solar generará una "montaña de residuos" y las dudas sobre la supuesta toxicidad de los paneles.