El dueño del laboratorio que lleva su apellido habría perdido entre 40 y 50 millones de euros en una serie que nunca se hizo. El aparente embaucador es el productor José Luis Moreno.
Uno de los herederos del imperio farmacéutico fundado por su abuelo hace casi 100 años acaba de publicar su último libro: Vivir se escribe en presente. En una entrevista con el diario La Nación confirmó que tiene residencia en Malta y que sus hermanos manejan la compañía.