El sector biotecnológico de Corea del Sur atraviesa un momento de auge. El entusiasmo de los inversores por la cartera de fármacos oncológicos que desarrolla la empresa biotecnológica Voronoi impulsó un fuerte repunte en sus acciones, que subieron 190% en lo que va del año. Esa escalada bursátil convirtió a Hyuntae Kim, director ejecutivo de la compañía, en el nuevo multimillonario del país. Kim, de 49 años, es el principal accionista de Voronoi, con una participación del 35%, valuada en US$ 1.000 millones. Su esposa, Kim Dae-yeon, tiene una participación adicional cercana al 1%.
La compañía, que tiene una capitalización bursátil de 4,3 billones de wones (unos US$ 2.900 millones) y no tuvo ingresos el año pasado, reportó ventas modestas por 7.500 millones de wones (US$ 5,1 millones) durante los primeros nueve meses de 2025. Sin embargo, las pérdidas crecieron 62%, hasta alcanzar los 38.400 millones de wones. A pesar del rojo en los balances, los inversores mantienen la expectativa en torno a sus dos fármacos oncológicos más prometedores: VRN10 y VRN11, que podrían revertir la situación.
VRN10 fue desarrollado para bloquear una proteína conocida como receptor 2 del factor de crecimiento epidérmico humano (HER2), responsable del crecimiento agresivo en algunos tipos de cáncer de mama. En el caso de VRN11, su función apunta a inhibir el receptor del factor de crecimiento epidérmico (EGFR), una mutación frecuente en el cáncer de pulmón de células no pequeñas, que genera un crecimiento celular anormal.
Los ensayos clínicos de fase 1 de ambos fármacos comenzaron en el primer trimestre de este año y se espera que terminen a mediados de 2026. "VRN11 avanza paso a paso hacia su validación", afirmó Hyunsoo Ha, investigador de Yuanta Securities, en un informe publicado este mes. "VRN10 también va por buen camino", agregó.
Con sede en Incheon, al oeste de Seúl, Voronoi desarrolla su trabajo a partir de una plataforma de inteligencia artificial propia llamada Voronomics que, según indica la empresa en su sitio web, "revoluciona el proceso de desarrollo de fármacos, permitiendo el rápido descubrimiento de candidatos a fármacos". En septiembre, Voronoi firmó un acuerdo de transferencia de tecnología por US$ 14,5 millones con Anvia Therapeutics, una compañía con sede en Nueva York, para su fármaco experimental VRN04, que actúa sobre la proteína RIPK1, vinculada a procesos de inflamación y crecimiento del cáncer.
Voronoi se fundó en 2015 por iniciativa de Hyunseok, el hermano menor de Kim. Un año más tarde, Kim compró 100.000 acciones de nueva emisión de la compañía, que por entonces era una empresa privada, a 10.000 wones cada una. Esa operación convirtió a Hyunseok en el principal accionista y, en 2016, en director ejecutivo. Actualmente, tiene una participación del 1,25% y está a cargo del área de inteligencia artificial. La compañía debutó en la bolsa en 2022, cuando comenzó a cotizar en el Kosdaq, el mercado tecnológico surcoreano. En esa operación, recaudó 52.000 millones de wones.
Antes de asumir la conducción de Voronoi, Hyuntae trabajó como jefe de gestión de activos en eBest Investment & Securities (hoy LS Securities), Hanwha Investment & Securities y KB Securities. Es licenciado en Administración de Empresas y tiene un MBA de la Universidad Nacional de Seúl.
Kim se suma al grupo de multimillonarios surcoreanos ligados al sector biotecnológico, donde ya figuran nombres como Seo Jung-jin, del gigante de los biosimilares Celltrion, con una fortuna estimada en US$ 7.600 millones; Park Soon-jae, de Alteogen, con US$ 3.900 millones; Chung Yong-ji, del fabricante de inyecciones antiarrugas Caregen, con US$ 1.500 millones; Jung Sang-soo, de PharmaResearch, que produce inyecciones para mejorar la piel a partir de células de esperma de salmón, con US$ 1.100 millones; y Lee Sang-hoon, de ABL Bio, que también ingresó esta semana al club de los tres comas, con US$ 1.400 millones.