Pablo Wahnon Editor de Innovación
Fue un cierre y un principio. Por un lado porque era la última charla del IBM AI Forum, y por el otro porque se tratata de una charla inaugural en el sentido de qué puede esperarse de la tecnología en el futuro cercano. A lo largo de la conversación con Agustín Bellido Gerente General IBM Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay, Pergolini reveló anécdotas de su infancia, su incursión en el mundo tecnológico y su perspectiva sobre el futuro, demostrando por qué sigue siendo un referente de la innovación en Argentina.
Una conexión personal con IBM y la tecnología
La relación de Mario Pergolini con IBM tiene raíces profundas y personales. Durante la entrevista, relató que su padre trabajó en la planta de IBM en Martínez cuando él era niño. "Mi papá trabajaba en la parte de programación de tarjetas perforadas. Me acuerdo de tener en casa un montón de cartones perforados", comentó con nostalgia.
Esta conexión temprana con la tecnología marcó su infancia, ya que su familia incluso se mudó a Martínez para estar cerca de la planta de IBM. "Vivía en Hipólito Yrigoyen y Ascuénaga, a metros de IBM. Para mí, la marca está ligada a esos recuerdos", añadió. Esta experiencia no solo lo conectó emocionalmente con IBM, sino que también despertó su interés por la tecnología. Años después, Pergolini tuvo la oportunidad de colaborar con la compañía en un video para mostrar el potencial de internet, grabado en las oficinas de IBM, que en ese entonces eran de las pocas empresas con la infraestructura necesaria para hacerlo.
"Eran los únicos que tenían un caño para mostrar internet", recordó, subrayando cómo IBM fue un facilitador clave en sus primeros pasos en el mundo digital.
De la radio pirata a la edición digital: un pionero en acción
Pergolini comenzó su carrera en los medios a los 16 años, trabajando en radio y, más tarde, como técnico electromecánico. Sin embargo, su espíritu inquieto lo llevó a explorar la tecnología de manera innovadora. En los años 80, junto a un grupo de amigos, creó la primera "radio trucha" de Argentina, una emisora no oficial que transmitía de manera precaria.
"Empezábamos en el 89.5 y, con el calor, en dos horas ya estábamos en el 106.3. Había que seguirla", bromeó, ilustrando las limitaciones técnicas de la época y su capacidad para sortearlas con creatividad. Este espíritu emprendedor lo llevó a experimentar con los primeros módems y a crear uno de los primeros Bulletin Board Systems (BBS) del país, un precursor de internet llamado "Sion".
Este proyecto evolucionó hasta convertirse en una compañía de internet relevante en Argentina. "Miramos al cielo, vimos un montón de líneas telefónicas y empezamos a conectar", explicó Pergolini, destacando cómo la tecnología le permitió imaginar posibilidades que otros aún no veían. En los años 90, con su productora Cuatro Cabezas, Pergolini volvió a innovar al adquirir una de las primeras máquinas digitales de edición de video en Argentina. Esta tecnología, que permitía editar de manera no secuencial, revolucionó la producción de programas como "El Rayo" y "Caiga Quien Caiga".
"La conductora no podía decir una frase completa, pero con la máquina digital podíamos cortar y pegar las partes que decía bien", relató. Esta solución, que hoy parece sencilla, fue un hito en un momento en que la edición digital era una novedad. Curiosamente, la máquina había sido obtenida de manera poco convencional, lo que llevó a una visita de representantes de Avid, la empresa creadora del equipo, para investigar su uso.
"Pensamos que íbamos a terminar en Guantánamo, pero llegamos a un acuerdo", bromeó Pergolini, destacando la mentalidad audaz que lo caracterizó.
Tecnología como habilitador: del streaming a la inteligencia artificial
Pergolini siempre ha visto la tecnología como un "hilo conductor" que le permitió explorar diferentes proyectos. Hace 15 años, fue pionero en el streaming con Vorterix, en una época en que la infraestructura de internet en Argentina era limitada. "Había 200 K en la red pública, tuvimos que armar peer-to-peer y desarrollar nuestro propio software", explicó.
Este esfuerzo no solo consolidó a Vorterix como un medio innovador, sino que también dio lugar a una empresa tecnológica para respaldar sus necesidades. Uno de los momentos más emotivos de la charla fue cuando Pergolini habló de cómo la tecnología transformó la vida de su madre, quien perdió la vista hace cinco años. Gracias a un prototipo de inteligencia artificial conversacional basado en Claude (la IA de Anthropic), su madre pudo recuperar autonomía. "Se levantaba y le decía: 'Claude, ¿cómo estás? ¿Cómo está el día?'. Le ponía la radio que quería, y se la apagaba si se cansaba", contó.
Este proyecto evolucionó hasta convertirse en ATO, un software diseñado para asistir a adultos mayores, permitiéndoles interactuar con una IA y recibir recordatorios de sus familiares. "ATO le hace más caso que a mí", bromeó Pergolini, destacando cómo la tecnología puede tener un impacto humano profundo más allá de los negocios.
En Vorterix, Pergolini también implementó inteligencia artificial para reemplazar locutores, una decisión que generó debate pero que, según él, aporta agilidad y variedad al medio. "No tenemos locutores hace tres años. La gente lo acepta y le agrada", afirmó, subrayando cómo la tecnología permite reinventar modelos tradicionales.
Una visión para el futuro: hackear mentalidades
Cuando Bellido le preguntó qué "hackearía" en la sociedad en términos de tecnología, Pergolini apuntó a la mentalidad de los líderes. "Hay que hackear la cabeza de los dirigentes que ven la tecnología como algo que los va a correr o a dejar atrás", dijo. Criticó la actitud de quienes presumen de no entender tecnología, como aquellos que dicen "no sé usar WhatsApp", y enfatizó que los líderes deben abrazar la tecnología para comprender a sus audiencias y mantenerse relevantes. "Es cómo entender a tus clientes, perfilarlos, saber cómo usan la tecnología", añadió.
Pergolini también reflexionó sobre el cambio cultural en la adopción tecnológica. Mientras que antes los errores eran un tabú, hoy se valoran como parte del proceso de innovación. "Aceptamos más los errores, los capitalizamos. Antes era impensable, pero hoy está normalizado", señaló.
Esta mentalidad lo ha llevado a seguir emprendiendo, incluso a sus 60 años, con proyectos que van desde un regreso a la televisión con formatos basados en inteligencia artificial hasta iniciativas en el ámbito satelital.
Agustín Bellido destacó el rol de IBM como un facilitador de la innovación, trabajando en un ecosistema abierto donde incluso los competidores colaboran para complementar tecnologías. "No se trata de una sola nube pública, sino de gestionar múltiples nubes con una estrategia de nube híbrida", explicó.
Esta visión de colaboración y apertura resuena con la experiencia de Pergolini, quien reconoció que Vorterix prosperó cuando surgieron competidores como Luzu y Olga. "Cuando estábamos solos, los primeros años fueron insoportables. Con competencia, compartiendo, nos va mucho mejor", afirmó. Ambos coincidieron en que la tecnología no solo es un habilitador de negocios, sino también una herramienta para transformar vidas y construir un futuro colaborativo. "El futuro no es una línea recta, es colaboración. Los invitamos a construirlo juntos", cerró Bellido, mientras Pergolini reforzó la idea de que la curiosidad y la disposición a experimentar son clave para no quedarse atrás.
A sus 60 años, Mario Pergolini sigue siendo el "niño curioso" que nunca dejó de experimentar. Desde sus inicios en una radio pirata hasta su incursión en el streaming y la IA, su trayectoria es un testimonio de cómo la tecnología puede ser un motor de cambio. Como él mismo dijo, "la tecnología siempre me puso en el 'modo curioso' y me dejó hacer cosas que otros no podían". Encender ese modo nos lleva a las puertas de la indagación y su comprensión profunda de la realidad para que podamos desplegar ese valor que provoca un cambio positivo en el mundo.
Pablo Wahnon
@pablowahnon