Cuando se habla de Inteligencia Artificial aplicada al mercado laboral, se suele dar un abordaje un tanto “apocalíptico” sobre el tema, como si la incorporación de la tecnología fuera a eliminar el trabajo humano. No es extraño, ya que el concepto de la máquina reemplazando al hombre es algo que forma parte del imaginario popular y que hemos visto en infinidad de libros y películas. Pero por el contrario, si bien habrá modificaciones en cuanto a algunas posiciones, creemos que esta tecnología impulsará la creación de nuevas oportunidades de trabajo, demandando una fuerza laboral con diferentes conjuntos de skills y competencias.

Así como en los últimos años tomaron relevancia posiciones como los Heads de Transformación Digital en compañías de diversos rubros, estamos presenciando un nuevo cambio en el panorama laboral, donde las principales empresas a nivel mundial (como Amazon, Visa y Coca Cola) están empezando a contratar profesionales especializados en la implementación de inteligencia artificial. A esta nueva posición se la conoce como “Head en Implementación de IA”. 

Según datos de LinkedIn, solamente en Estados Unidos el número de personas en puestos de liderazgo en IA se ha triplicado en los últimos cinco años, contrarrestando la tendencia a la baja en la contratación de la industria tech en general. Esta tendencia no es ajena a nuestra región, ya que según la empresa Noventiq, que recopiló la información de 140 directores y altos directivos que cubren diversos sectores y cargos en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, México y Perú, un 68,3% de los ejecutivos del sector tecnológico ya han implementado la IA Generativa total o selectivamente en sus empresas.

Este fenómeno refleja la creciente necesidad de aprovechar el potencial de la inteligencia artificial para mejorar la eficiencia, la toma de decisiones y la competitividad empresarial. Las organizaciones necesitan profesionales que los ayuden a implementar esta tecnología dentro de sus workflows con el fin de optimizar procesos, mejorar tiempos y rendimientos. 

Si bien es cierto que algunas tareas tenderán a automatizarse —por ejemplo, con el uso de chatbots y sistemas de atención al cliente—, al mismo tiempo requerirán estrategia, liderazgo y monitoreo en la ejecución. Por esta razón quizás antes de hablar de la IA reemplazando tareas, deberíamos ver a la inteligencia artificial como un complemento y potenciador de nuevas posiciones.

En lo que compete a nuestro sector, la inteligencia artificial no solo puede ayudar a crear nuevas posiciones de trabajo, sino que también puede ayudar a las empresas y consultoras de recursos humanos a agilizar la búsqueda de nuevos candidatos y, por ende, su posterior contratación. 

La incorporación de IA en las empresas trajo nuevas formas de solucionar los problemas, nuevos niveles de velocidad y precisión y nuevas formas de trabajar y ponderar lo que se puede hacer. Un relevamiento realizado por Grupo Gestión a más de 60 directores y gerentes de recursos humanos en la Argentina muestra que el 60% de ellos ve en la IA una tecnología confiable para la selección de personal. Aunque somos equipos dedicados a la gestión de personas, reconocemos el papel crucial que la inteligencia artificial desempeña en la transformación de los procesos de capital humano. La IA aporta transparencia, eficacia y perfección a nuestro trabajo. Creemos que cuanto más masivo es el proceso, más beneficios trae incorporar la IA, que ayuda como filtro inicial. Las compañías están dispuestas a un margen de error, en pos de que en 50 minutos se analicen 20.000 CV. 

Sin embargo, vale aclarar que cuando se trata de búsquedas ejecutivas  todavía no vemos tanto impacto. Aunque contemos con sistemas que tienen filtros por palabras clave y otras herramientas, el proceso de evaluación de competencias blandas, motivaciones, fit cultural, entre otras características, sigue siendo el core del proceso. En las personas, siempre hay algo que trasciende el dato.

De todas formas sabemos que inevitablemente algunos profesionales se van a ver desplazados de sus posiciones. Esto ha sucedido en cada revolución industrial y tecnológica. Sin embargo,  un estudio de la consultora PwC sobre la IA asegura que es probable que cualquier pérdida de posiciones de trabajo a causa de la automatización se vea ampliamente compensada a largo plazo por los nuevos trabajos creados como resultado de la economía más grande y fuerte que estas nuevas tecnologías hacen posible.

La pregunta que deberíamos hacernos es: ¿cómo hacemos para que estas personas no pierdan sus trabajos, sino que simplemente cambien a otras posiciones dentro de las empresas? Aquí es donde la formación y la capacitación juegan un rol clave. Es evidente que los estudios vinculados a la implementación tecnológica adquirirán un papel destacado en el panorama laboral y las empresas deberán destinar recursos a la capacitación de sus empleados para asumir estos nuevos roles. De hecho, esto podría convertirse en un factor determinante en la competencia por atraer y retener el talento del futuro.

*La columna fue escrita por Daniel Iriarte, Director Asociado de Glue Executive Search