Es el presidente del BIQ, el Banco Islámico de Qatar, la segunda institución financiera del mayor productor de gas del Golfo Pérsico y ofrecería unos 6000 millones de dólares.
Un portavoz del empresario, quien tiene una fortuna estimada en US$ 13 mil millones, afirmó que la intensión de compra es real. La institución está valuada en US$ 4.7 mil millones y es la tercera con mayor valor dentro del mercado futbolístico internacional.