Bernarda Cella, la arquitecta del streaming: "Es difícil ponerle un precio a OLGA"
Con apenas 28 años, Bernarda Cella es una de las mentes detrás del fenómeno OLGA. El canal de streaming no para de crecer y ya tiene unidades de negocio relacionadas a eventos en estadios, obras de teatro y producciones para plataformas. De un "juego entre amigos" a una empresa que vale US$ 20 millones.

En la calle, y de cara al estudio vidriado ubicado en la esquina palermitana de Humboldt y Cabrera, una fila de adolescentes esperan su oportunidad para ingresar al programa "Tapados de laburo". "Vamos a ir entrando de a diez", dice la productora del popular ciclo que está entre los más vistos del país según En Directo, una medición de canales de streaming llevada a cabo por la Universidad de Buenos Aires. Todos las escuchan con atención y esperan con paciencia que la puerta de ingreso a OLGA se abra

Mientras tanto, en el sexto piso del edificio, Bernarda Cella prepara los eventos que marcarán el cierre del 2025 y organiza detalles de la temporada de verano, que abrirá el 2026. "Todo el día pienso en OLGA", admite, entre risas, la cofundadora del canal. Y agrega: "Además de que es el sueño de mi vida, lo estoy haciendo con mi hermano. Hacemos cosas que nos dan orgullo y encima a la gente le gusta. Es una mezcla perfecta. Tengo 28 años y ni en mis mejores sueños me imaginé que esto podía ser así".

Bernarda Cella, cofundadora y CEO de OLGA

En apenas dos años y cuatro meses, el canal -que fundó junto a su hermano Luis, los hermanos Guemdjian (amigos de ellos), y "Migue" Granados, quien conduce su programa y es director creativo de la compañía-, alcanzó los 2 millones de suscriptores en YouTube, convirtiéndose en el primero del país en lograrlo en tan poco tiempo. "El número en sí no es nada", dice Cella. "Me encanta que tengamos 2 millones de suscriptores, pero eso no nos da nada. Lo que sí representa es el crecimiento del canal, todo lo que hicimos en dos años. Es como un mimo y un poco de ego también. Poder decir 'qué bueno, somos los primeros que en dos años conseguimos un número tan grande'. Es un montón de gente, y lo sentimos".

Un camino de éxito

La historia de OLGA no comenzó por casualidad pero sí tuvo una serie de hechos afortunados. "Mi hermano estaba almorzando con un amigo y, de forma casual, le contó la idea que tenía. El objetivo era hacer un canal con un estudio a la calle, un formato que hoy todos reconocen pero que en ese momento no existía. El amigo le comentó que tenía un local que era exacto lo que estaba describiendo y de ahí fueron a verlo. Se pararon del almuerzo y vinieron acá, a esta esquina donde estamos ahora. Era lo que queríamos y en ese momento se empezó a armar", recuerda Cella.

Los dueños de OLGA no revelan cuál fue la inversión inicial para crear el canal. Sin embargo, según consultas de Forbes con distintas fuentes de la industria del entretenimiento local, se estima que para realizar el estudio, equiparlo con la tecnología adecuada y contratar a los primeros empleados, se requirieron, aproximadamente, US$ 350.000

Cella (28) revela a Forbes cómo es liderar uno de los streamings más existosos del país

Así, lo que empezó como una idea entre amigos se transformó en una empresa que escaló rápidamente, inició un camino de expansión y conquistó a una comunidad que crece cada día. "Somos rentables. El proyecto comenzó como un juego y hoy es una empresa cada vez más grande, con más unidades de negocio y más responsabilidades. Pero seguimos con la misma pasión del primer día", afirma Cella. 

Un modelo que se multiplica

El fenómeno OLGA crece en más de una dirección. Además del canal, hoy ya cuentan con unidades de negocio que incluyen merchandising, festivales, teatro, contenido on demand y shows en venues como el Movistar Arena y el estadios de Argentinos Jrs, donde se realizó recientemente el Maradona Day, un especial dedicado a homenajear a Diego Maradona. 

"Con todo esto, el canal de streaming pasa a ser una más de las unidades, porque fuimos creando más. De hecho, en 2026 vamos a hacer una obra de teatro con un protagonista muy importante, una serie para una plataforma y también compramos el formato 'El Hormiguero' de España para hacer acá", detalla Cella. 

En términos de facturación, el crecimiento también fue "exponencial". Las fuentes de ingreso que al principio eran YouTube y sponsoreo hoy se diversificaron: "Venta de entradas, venta de merch, venta con las marcas que pautan en OLGA. De hecho cada vez representa menos porcentaje la facturación por visualizaciones en YouTube y sube el relacionado a las marcas", precisa Cella.

Los directivos de OLGA ya tienen charlas para exportar su formato a otros países de la región.

Desde OLGA cuentan a Forbes que el crecimiento de 2025 en comparación con 2024 será de un estimado del 115%. Considerando una inflación anual de 28%, se puede afirmar la exponencialidad de inversión de los anunciantes en Olga, triplicando la inflación estimada y creciendo un 90% por encima de la misma. 

Cella asegura que prácticamente el 100% de los auspiciantes son privados. "Tenemos un promedio mensual de 100 anunciantes con sus diferentes marcas. Los principales anunciantes son del rubro del consumo masivo, como Unilever, Danone, L'Oréal y Newsan, retail y finanzas, como Mercado Libre, bancos privados, y billeteras virtuales, bebidas (Coca cola, Fratelli Branca, CCU y Quilmes) y laboratorios. Hoy, en Olga están todos los segmentos. Este año buscamos como objetivo esa consolidación. Ser una oferta de comunicación para más segmentos y rubros", destaca la fundadora del canal.

En esa línea, también cuenta que hoy tienen un tarifario con precios diferentes por programas, por tipo de acción y por evento. "Por lo general, son propuestas creativas a medida que conllevan diferentes producciones. Es muy difícil hoy estimar un promedio porque no sería relevante. No tenemos algo único. Todo depende de lo que el anunciante quiera hacer en OLGA", profundiza al respecto.

Al consultar con fuentes del mercado, Forbes no pudo estimar de manera confiable una cifra de facturación que se aproxime a la realidad. Sin embargo, consultados por este medio afirmaron que OLGA tuvo ofertas de compra que se aproximaron a los US$ 20 millones en los últimos meses. "La facturación anual debe ser alta para ofertar esa cifra a la espera de recuperar la inversión en pocos años", afirmó un importante dueño de medios local.

¿Olga tiene un precio para ustedes?

Siempre hay un precio, pero por ahora no. Creemos que el canal y la marca OLGA todavía tienen mucho para crecer. Además, tenemos muchas ganas de seguir trabajando en eso. Para nosotros es como un hijo, entonces también tiene una cuota muy emocional y muy personal. Es una cosa que arrancó como un juego entre amigos que hoy se transforma en una empresa.

Una mujer al frente

Ser CEO joven y mujer en una industria históricamente masculina no es menor. "No es un tema que esté resuelto para nada. Arrancás perdiendo 3-0 por las dudas. Hago muchas cosas para que haya mujeres ocupando lugares importantes en OLGA. De hecho, la mayoría de los directores del canal son mujeres. Nosotras vamos más de abajo, pisando despacito, y yo intento que pisemos fuerte, que se nos escuche, que valoremos lo que hacemos".

A lo largo de su carrera, en la cual pasó por Canal 9, C5N, Telefe, Radio Nacional y el propio Luzu con un programa junto a Gregorio Rosello, Cella cuenta que tuvo situaciones que solamente le pasaron por ser mujer. "Tenía el bingo completo: mujer, joven y, encima hija de...", señala. Tanto ella como su hermano son hijos de Luis Cella, histórico productor de Susana Giménez en Telefe: "Todo llevaba a tener que demostrar que era buena y que no era una 'parada'. Eso no les pasa a los varones. Hay una diferencia y hoy sigue existiendo".

Con Migue Grandos como figura central, OLGA se expande a otros formatos como teatro y series para plataformas

Gente mejor que uno

En el corazón del proyecto hay una filosofía de trabajo clara. "Nos gusta tener gente mejor que nosotros", dice Cella. "Gente que piense, que nos pueda discutir, que diga 'esto no está bien' y tenga fundamentos. Nos gusta mucho escuchar a la gente y a los equipos, porque realmente son los mejores. Nunca vi un equipo así. Tenemos desde chicos de 18 años que recién arrancan hasta gente con más experiencia y todos tiran para adelante. Buscamos gente con pasión, con alma, con ganas de superarse".

En la actualidad, son más de 100 las personas que trabajan en OLGA, incluída el área de producción de los programas pero también las de legales, de finanzas, presupuestos y más. A eso hay que sumarle el trabajo indirecto que se genera mes a mes ya que cada show y producción implica a decenas más de personas que trabajan para llevarlas a cabo. 

El modelo y su crecimiento es tan grande que, poco a poco, comienza a tener proyección regional. Olga Chile, Olga México y Olga España están en los planes, según cuenta Cella. "Son posibilidades muy grandes para OLGA. Si iniciamos este recorrido, queremos hacerlo con socios locales, porque cada país tiene su cultura y su idiosincrasia. Todavía no hay nada concreto pero son conversaciones que hemos tenido", explica Cella.

Al terminar la entrevista, en la puerta de OLGA sigue la fila de jóvenes que esperan con paciencia ingresar al estudio para conocer a los conductores del programa que tanto admiran. Algunos incluso llevan bolsas con regalos para darles: carteles, remeras, gorras y hasta comida que prepararon especialmente para ellos. "Sentimos a la gente, realmente sentimos que están ahí con nosotros y el crecimiento que tiene la comunidad a diario", afirma Cella. Y remata: "Por eso digo que es difícil ponerle un precio a todo esto. Va a costar mucho soltar OLGA".