A partir del 1º de octubre, el Gobierno liberará el precio de la nafta. La medida, pensada para el 2018, fue adelantada por decisión del Ministerio de Energía.

Según anunció ayer el ministro de energía, Juan José Aranguren, a partir de este domingo, se pondrá en marcha el programa de desregulación en los precios de la nafta. Con esta medida, serán las petroleras las encargadas de determinar los aumentos.

La idea del gobierno apunta a alinearse con los precios internacionales. Si bien el dictamen estaba pautado para el próximo año, el Ministerio de Energía decidió adelantar la modificación respecto del esquema que está vigente desde principios de la década del 90.

El ministro de Energía, Juan José Aranguren, anunció este lunes que el barril cuesta en el exterior unos 59 dólares, mientras que en la Argentina oscila entre 55 y 57 dólares.

“A partir de la caída de precios internacionales, quedamos por encima de esos números, pero con gradualismo en los últimos tres años se fueron acomodando a los valores”, explicó el ministro en la Exposición Argentina Oil & Gas, organizada por el Instituto Argentino del Petróleo y el Gas (IAPG).

La actualización del precio de la nafta se realizaba cada tres meses en función de lo pautado con las compañías, de acuerdo con una fórmula integrada por el precio internacional del petróleo, el de los biocombustibles y el dólar.

Si bien con esa modificación se cancelaría la suba pautada para principios de octubre, el hecho de equiparar los precios locales con internacionales implicaría un aumento inevitable.

En julio, los precios de los combustibles aumentaron entre 6% y 7,2% en las estaciones de servicio de la Capital Federal y el Conurbano, lo que llevó el litro de la nafta de mayor calidad hasta los 23 pesos. A principios de año, los precios de los combustibles habían subido un 8%, aunque en abril hubo una baja del 0,1% en naftas y 2,6% en gasoil.