La compañía solo está produciendo en China actualmente, donde se aliviaron las restricciones a la producción.                   

En la jornada de ayer, Ford Motor Co FN reconoció que espera una pérdida de impuestos cercanos a los US$ 600 millones durante el primer trimestre del 2020, dado que el brote y expansión del Coronavirus obligó a la compañía a cerrar varias plantas. Hoy sólo están produciendo vehículos las empresas conjuntas de Ford en China, donde justamente la pandemia se calmó.

A pesar de este contexto adverso, el presidente financiero Tim Stone dijo en un comunicado que “creemos que hoy tenemos suficiente efectivo para llegar al menos al final del tercer trimestre sin producción incremental de vehículos ni ventas al por mayor o acciones financieras”. 

Cuando se le preguntó si Ford solicitaría préstamos del gobierno estadounidense o de la Reserva Federal, un portavoz de Ford afirmó que, a diferencia de la Gran Recesión, todavía hay mucha liquidez en los mercados de capitales. 

“Tenemos una amplia gama de opciones” para obtener financiamiento adicional si es necesario, dijo el portavoz. 

Al 9 de abril, Ford tenía alrededor de 30.000 millones de dólares en efectivo en su balance general, incluidos 15.400 millones de dólares que tomó prestados el mes pasado contra dos líneas de crédito existentes. 

Ford dijo que cualquier decisión sobre el reinicio de sus plantas se tomará “en cooperación con sindicatos locales, proveedores, distribuidores y otras partes interesadas”. 

En marzo, la compañía cerró fábricas en América del Norte y Europa debido a la creciente pandemia.